Ramón quiso pasar una noche en el museo y visitó el Prado con un candil, gracias a su amigo Beruete director, entonces. Se vistió la armadura de Felipe II del escultor italiano Pompeo Leone. En Automoribundia relata la impresión que le produce la Magdalena de Pedro de Mena (hoy en Valladolid) y el Cristo de Velázquez a la luz cimbreante de su candil.
Nació en el corazón del Madrid de los Austrias, en la calle de las Rejas, ahora llamada de Guillermo Roland. Desde la Argentina lo trajeron a la Sacramental de San Justo, en la ribera del Manzanares, muy cerca de donde vivió Goya cuya biografía, una auténtica obra maestra, escribió. Comparte sepulcro con Larra. Pregunté a Gladys, nuera de Luisa Sofovich y heredera el motivo. No lo sabía.
¿Querrían ahorrarse una sepultura las autoridades franquistas que organizaron el viaje de vuelta?
Por las noches, allí en el anfiteatro de los artistas que los rodea, se oyen voces, risas y exclamaciones. Al alba concluye la tertulia catacúmbica a la que los vivos no están invitados. Las gregues se recogen y toman aliento para resurgir renovadas. Su alma es inmortal.
Por las noches, allí en el anfiteatro de los artistas que los rodea, se oyen voces, risas y exclamaciones. Al alba concluye la tertulia catacúmbica a la que los vivos no están invitados. Las gregues se recogen y toman aliento para resurgir renovadas. Su alma es inmortal.
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